No nos cansemos de hacer el bien

En la vida, hay muchas cosas que pueden hacernos sentir cansados y desanimados. Sin embargo, hay una cosa que nunca deberíamos cansarnos de hacer: el bien. Exploraremos lo que dice la Biblia sobre este tema y por qué es importante seguir haciendo el bien, incluso cuando nos sentimos agotados.

Quién dijo no nos cansemos de hacer el bien

La frase «no nos cansemos de hacer el bien» se encuentra en la Biblia, específicamente en el libro de Gálatas, capítulo 6, versículo 9. En este pasaje, el apóstol Pablo escribe: «No nos cansemos, pues, de hacer el bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos».

Qué dice Gálatas 6:9

En este versículo, Pablo nos anima a seguir haciendo el bien, incluso cuando nos sentimos cansados o desanimados. Él nos recuerda que, aunque puede parecer que nuestros esfuerzos no están dando frutos, eventualmente cosecharemos los beneficios de nuestras acciones si perseveramos.

Qué parte de la Biblia dice no te canses de hacer el bien

Además de Gálatas 6:9, hay otros pasajes en la Biblia que nos animan a seguir haciendo el bien. Por ejemplo, en Proverbios 3:27, se nos dice: «No te niegues a hacer el bien a quien lo necesita, cuando puedas hacerlo». Este versículo nos recuerda que siempre debemos estar dispuestos a ayudar a los demás, especialmente cuando tenemos la capacidad de hacerlo.

  Fiestas paganas que no deben celebrar los cristianos

Qué dice en Proverbios 3:27

En Proverbios 3:27, se nos recuerda que siempre debemos estar dispuestos a hacer el bien a los demás. A veces, puede ser fácil negarse a ayudar a alguien porque estamos ocupados o porque no queremos salir de nuestra zona de confort. Sin embargo, este versículo nos anima a superar esas barreras y hacer lo correcto, incluso cuando no es fácil.

Por qué es importante no cansarnos de hacer el bien

Hay muchas razones por las que es importante seguir haciendo el bien, incluso cuando nos sentimos cansados o desanimados. En primer lugar, cuando hacemos el bien, estamos ayudando a los demás y haciendo del mundo un lugar mejor. Incluso si no vemos los resultados inmediatos de nuestras acciones, podemos estar seguros de que estamos haciendo una diferencia positiva en la vida de alguien.

Además, cuando hacemos el bien, también estamos mejorando nuestra propia vida. Al ayudar a los demás, estamos cultivando la empatía, la compasión y la generosidad en nosotros mismos. Estas cualidades nos hacen mejores personas y nos ayudan a construir relaciones más fuertes y significativas con los demás.

Cómo podemos seguir haciendo el bien, incluso cuando nos sentimos cansados

Aunque es importante no cansarnos de hacer el bien, también es cierto que a veces puede ser difícil mantener la motivación y la energía. Aquí hay algunas cosas que podemos hacer para seguir haciendo el bien, incluso cuando nos sentimos agotados:

  • Busca apoyo: Habla con amigos, familiares o mentores que puedan ayudarte a mantener la motivación y la perspectiva.
  • Descansa: Asegúrate de tomarte el tiempo para descansar y recargar tus baterías. Si estás agotado, es difícil tener la energía para hacer el bien.
  • Encuentra tu pasión: Encuentra una causa o un proyecto que te apasione y que te haga sentir motivado y entusiasmado.
  • Recuerda por qué lo haces: Piensa en las razones por las que te importa hacer el bien y recuerda que tus acciones están haciendo una diferencia positiva en el mundo.
  Confiar en Dios en tiempos difíciles

Conclusión

No nos cansemos de hacer el bien. Aunque puede ser difícil mantener la motivación y la energía, es importante recordar que nuestras acciones están haciendo una diferencia positiva en el mundo. Al seguir haciendo el bien, estamos ayudando a los demás y mejorando nuestras propias vidas. Así que sigamos adelante, incluso cuando nos sentimos cansados o desanimados, y recordemos las palabras del apóstol Pablo: «No nos cansemos, pues, de hacer el bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos».

Deja un comentario