La protección de Dios para sus hijos

La protección de Dios es una de las mayores bendiciones que podemos recibir en la vida. Como padres, queremos proteger a nuestros hijos de todo peligro y daño, pero a veces nos sentimos impotentes ante las situaciones que se presentan. En esos momentos, es importante recordar que Dios está con nosotros y que Él tiene el poder de proteger a nuestros hijos de todo mal.

Qué dice la Biblia sobre proteger a los hijos

La Biblia nos habla mucho sobre la importancia de proteger a nuestros hijos. En Proverbios 22:6, se nos dice: «Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él». Esto significa que es nuestra responsabilidad como padres guiar a nuestros hijos por el camino correcto y protegerlos de las influencias negativas del mundo.

En Deuteronomio 6:6-7, se nos dice: «Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes». Esto significa que debemos enseñar a nuestros hijos los mandamientos de Dios y hablarles de Él en todo momento, para que puedan crecer en su fe y estar protegidos por Su amor y cuidado.

Cuál es el salmo de protección a los hijos

El Salmo 91 es conocido como el salmo de protección a los hijos. Este salmo nos habla del amor y la protección de Dios, y nos asegura que Él estará con nosotros en todo momento. Al recitar este salmo, podemos pedirle a Dios que proteja a nuestros hijos de todo mal y peligro.

  Los milagros de Jesús para niños

El Salmo 91 dice así:

El que habita al abrigo del Altísimo
Morará bajo la sombra del Omnipotente.
Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío;
Mi Dios, en quien confiaré.
El te librará del lazo del cazador,
De la peste destructora.
Con sus plumas te cubrirá,
Y debajo de sus alas estarás seguro;
Escudo y adarga es su verdad.
No temerás el terror nocturno,
Ni saeta que vuele de día,
Ni pestilencia que ande en oscuridad,
Ni mortandad que en medio del día destruya.
Caerán a tu lado mil,
Y diez mil a tu diestra;
Mas a ti no llegará.
Ciertamente con tus ojos mirarás
Y verás la recompensa de los impíos.
Porque has puesto a Jehová, que es mi esperanza,
Al Altísimo por tu habitación,
No te sobrevendrá mal,
Ni plaga tocará tu morada.
Pues a sus ángeles mandará acerca de ti,
Que te guarden en todos tus caminos.
En las manos te llevarán,
Para que tu pie no tropiece en piedra.
Sobre el león y el áspid pisarás;
Hollarás al cachorro del león y al dragón.
Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré;
Le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre.
Me invocará, y yo le responderé;
Con él estaré yo en la angustia;
Lo libraré y le glorificaré.
Lo saciaré de larga vida,
Y le mostraré mi salvación.

Qué es la protección de Dios

La protección de Dios es el amor y cuidado que Él tiene por nosotros. Cuando confiamos en Él y seguimos Sus mandamientos, podemos estar seguros de que Él nos protegerá de todo mal y peligro. La protección de Dios no significa que no tendremos problemas o dificultades en la vida, pero sí significa que Él estará con nosotros en todo momento y nos ayudará a superar cualquier obstáculo.

  Sed santos porque yo soy santo

Donde dice en la Biblia que Dios cuida de nosotros

La Biblia nos habla en muchas ocasiones del cuidado y amor de Dios por nosotros. En Mateo 6:26, Jesús nos dice: «Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?». Esto significa que si Dios cuida de las aves del cielo, que no tienen preocupaciones ni responsabilidades como nosotros, cuánto más cuidará de nosotros, que somos Sus hijos y estamos hechos a Su imagen y semejanza.

En Salmo 121:7-8, se nos dice: «Jehová te guardará de todo mal; El guardará tu alma. Jehová guardará tu salida y tu entrada Desde ahora y para siempre». Esto significa que Dios nos protegerá de todo mal y peligro, y estará con nosotros en todo momento, cuidando de nosotros y guiándonos por el camino correcto.

Conclusión

La protección de Dios es una bendición que debemos valorar y agradecer en todo momento. Como padres, es nuestra responsabilidad guiar a nuestros hijos por el camino correcto y enseñarles a confiar en Dios para su protección y cuidado. Al recitar el Salmo 91 y confiar en la protección de Dios, podemos estar seguros de que Él estará con nosotros y con nuestros hijos en todo momento, guiándonos y protegiéndonos de todo mal y peligro.

Deja un comentario